Navalny

En agosto de 2020, Navalny fue envenenado en secreto con un agente nervioso químico de uso militar, en un atentado escandalosamente flagrante. Tras ser trasladado a Alemania para recibir atención médica, Navalny, ya recuperado, colaboró estrechamente con las organizaciones internacionales de noticias Bellingcat y CNN para investigar el delito, vinculando finalmente el veneno con los servicios de seguridad rusos, pese a los desmentidos del Kremlin.