La prueba del crimen

Joey Gazelle lleva 10 años viviendo una doble vida: por un lado es un ejemplar marido y padre de familia y por el otro trabaja para la banda italiana de los Perello. Durante una venta de drogas frustrada, un policía corrupto es asesinado a tiros y Joey debe encargarse de hacer desaparecer el arma homicida, pero lejos de seguir las órdenes de la banda, el mafioso oculta la pistola en su casa como futura garantía contra sus jefes. Sin quererlo, Joey ha puesto en peligro a toda su familia.

Un día Oleg, el mejor amigo de su hijo Nicky, encuentra el arma y se la lleva sin saber que eso puede amenazar su vida y la de muchos otros. Mientras tanto, Joey intentará desesperadamente localizar al pequeño Oleg y su recién adquirido tesoro antes de que lo hagan los hombres de Perello o incluso la propia policía.